Mg. Patricia Celis

Debe contar con:

Capacidad de comunicarse de manera clara y confiable, tanto de forma escrita como oral con el fin de interactuar de manera eficaz con el propio cliente, así como con familiares y demás miembros de algún equipo interdisciplinario.

 

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Un terapista que cuenta con experiencia, no le dirá que necesita trabajar solo con el paciente y los familiares informarse de lo que está trabajando únicamente por un cuaderno de trabajo o ciertas indicaciones, al contrario, el entorno en donde vive y se desenvuelve el “cliente” es el apoyo ideal para el logro de metas de rehabilitación oral.

 

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Hacer uso del tacto, paciencia y optimismo al comunicarse con pacientes, padres y demás miembros del equipo, con el fin de conservar relaciones efectivas y de cooperación, esto incluye a otros profesionales que se necesiten para una recuperación integral si el caso lo amerita.

      

 MAESTRAS O MAESTROS CLÍNICAS U HOSPITALES

 

Los familiares necesitan también comprensión y orientación cuando se enfrentan a cuadros clínicos de su familiar provocados por eventos vitales que ocasionan un desajuste familiar significativo como los que pueden presentarse en adultos debido a daños neurológicos producto de derrames cerebrales, demencias, traumas de cráneo, enfermedades degenerativas como Parkinson, ELA, etc.

 

AFASIAS

 
Un buen terapista del lenguaje debe instruir a los padres y familiares en cómo ser parte del proceso de las terapias basado en el amplio conocimiento sobre el lenguaje que posee, por ejemplo, en la tartamudez, el origen de estos casos casi siempre es de índole emocional, los propios familiares tildan con apodos y burlas, exigencias y menosprecio por no hablar “bien” y es entonces cuándo se deben hacer cambios en el hogar con el fin de no dañar la autoestima de sus hijos o hijas.